Esta semana tuvo lugar el segundo y último debate entre los dos principales candidatos a primer ministro antes de las elecciones, el primer ministro Rishi Sunak y su contrincante laborista Keir Starmer.
La estrategia no cambió mucho respecto al primer debate. El líder laborista, con las encuestas a favor y, por tanto, quién más tenía que perder, permaneció en su perfil bajo intentando que no le metieran muchos goles. Su debilidad fue, al igual que en el primer debate, su falta de concreción ante las preguntas directas de su contrincante que, de nuevo, insistió una y otra vez en que los laboristas tienen prevista una subida de impuestos que no se atreven a revelar antes de las elecciones. Por mucho que Sunak le presionó, Starmer no negó que tal subida se vaya a producir. Lo mismo sucedió en otros ámbitos como la política migratoria.
“Yo ya le he dicho a los ciudadanos lo que voy a hacer con los inmigrantes ilegales: los enviaré a Ruanda. Quienes nos están viendo pueden estar o no de acuerdo, pero al menos yo digo claramente lo que voy a hacer. Dígales lo que va a hacer usted”.
El resultado: según los televidentes, un empate técnico, pero según la mayoría de los analistas, la victoria fue claramente para Sunak.
Pero más que un ganador podemos vislumbrar cuál de los candidatos ha estado más cerca de conseguir su objetivo, y ese podría ser Keir Starmer. Su meta era atravesar el calvario de los debates sin demasiadas heridas a pesar de su pobre actuación, y las encuestas, al menos, muestran que ha sido así.
Hay un debate adicional que de forma indirecta está teniendo lugar en la campaña electoral, donde participan tres partidos más que han cobrado relevancia en los últimos años: los Verdes, a la izquierda, el Partido Liberal, en el centro, y el Partido Reformista, más a la derecha de los conservadores.
Laboristas y conservadores intentan hacer valer su tradición centenaria de partidos con experiencia de gobierno. Los nuevos partidos atacan esa misma tradición argumentando que el país necesita nuevas soluciones que sólo ellos pueden dar.
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